Luxación de cadera en recién nacidos: puntos importantes

La luxación congénita de cadera en recién nacidos es una enfermedad que requiere atención especial por parte de los padres y del personal médico. Esta patología se produce cuando la cabeza femoral no entra en el acetábulo, sino que va más allá de la posición normal. Las causas pueden variar, pero el factor principal son los músculos y ligamentos débiles que no son capaces de mantener el hueso en su lugar. En una etapa temprana, tal anomalía puede detectarse mediante un examen ecográfico, lo que permite tomar medidas oportunas.

Uno de los factores que contribuyen a la aparición de la luxación es la mala nutrición de la madre durante el embarazo, así como la presencia de enfermedades hereditarias. La dislocación de cadera se observa con frecuencia en niñas y primogénitos. Es importante tener en cuenta que en el momento del diagnóstico de la luxación, es posible que el bebé no sienta dolor. Por lo tanto, los padres deben vigilar cómo se desarrollan las piernas de su hijo y, si notan alguna desviación, consultar a un médico.

Para diagnosticar la enfermedad a menudo se utiliza el método de doblar las piernas del bebé. Si se observa un clic característico, esto puede indicar una dislocación. A veces esto puede ser difícil de notar, especialmente si el niño no siente dolor. Para mayor confianza y confirmación del diagnóstico, un ortopedista examina al bebé a los tres meses de edad. Es este especialista quien podrá determinar la necesidad de tratamiento y prescribir procedimientos adicionales.

Un método de tratamiento es utilizar un yeso con una férula para mantener la articulación en la posición correcta. Sin embargo, si la enfermedad no se detecta en las primeras etapas, en algunos casos puede ser necesaria la tracción de las extremidades. En situaciones extremas, la articulación se reinicia bajo anestesia, especialmente si el problema se hace evidente cuando el niño comienza a caminar.

Además de los métodos médicos, el desarrollo físico del bebé es de gran importancia. La gimnasia para bebés ayudará a fortalecer los músculos y las articulaciones, manteniéndolos en un estado funcional normal. Se aconseja a los padres seguir todas las recomendaciones del pediatra y del ortopedista para minimizar los riesgos de desarrollar enfermedades del sistema musculoesquelético.

Es importante recordar que el diagnóstico y el tratamiento oportunos de la dislocación de cadera en recién nacidos pueden mejorar significativamente el pronóstico y prevenir el desarrollo de complicaciones en el futuro.