Cómo hacer amigos a tu hijo y a tu padre

A veces parece que las cuestiones relacionadas con la educación y el establecimiento de relaciones con los hijos son responsabilidad exclusiva de las madres, mientras que los padres se dedican a trabajar. Sin embargo, conviene recordar que el papel del padre en la vida del niño no es menos importante que el de la madre. Es duro para el padre, es duro para el padre....

Todo el mundo conoce la escena en la que un niño se encuentra con su padre en la puerta de casa y éste, cansado y hambriento, apenas se fija en él, acariciándole ligeramente el pelo. Está cansado, y los juegos ruidosos y las conversaciones educativas con su hijo parecen innecesarios. Pero incluso con una agenda apretada, no hay razón para renunciar a participar en la crianza de su hijo. No se trata tanto de ser padre como de establecer una relación cálida entre padre e hijo.

El papel del padre en la mente subconsciente del niño es siempre un modelo a seguir. Los niños suelen copiar los hábitos y el comportamiento de sus padres. Si el padre fuma, el niño, al verlo, puede "fumar" con un caramelo en la boca. Los niños, sobre todo, siempre confían plenamente en sus padres. Resulta que el niño busca la atención del padre, y éste le presta poca atención.

Muy a menudo, el padre no se comunica con el niño porque no sabe cómo hacerlo. No siempre sabe lo que le interesa al niño, tiene miedo de que sus acciones puedan perjudicarle. A causa de los miedos y la aprensión, el padre puede comportarse torpemente. Es en este momento cuando puedes salvar la situación organizando actividades conjuntas para que se conozcan mejor. De este modo, el padre entenderá mejor al niño observando su comportamiento, y el niño empezará a ver al padre como un amigo y no como un adulto cualquiera.

Después de pasear y jugar juntos, cuando el padre se acerque más a la vida del niño, podrás dejarlos solos. Sin intermediarios innecesarios, padre e hijo pueden socializar mejor, jugar. Es el momento en que el padre podrá contarle al niño muchas cosas interesantes y recordar su infancia.

Si los hombres se dedican a algún asunto sin la participación de la madre, el niño sentirá confianza en el padre y se confirmará en la creencia de que puede enseñarle mucho. Si el padre cumple estas expectativas, el niño le respetará más y buscará su apoyo.