Desde la antigüedad, la gente ha utilizado las plantas para curar y cuidar el cuerpo. Este conocimiento se transmitió de generación en generación y con cada nuevo descubrimiento la gente se volvió cada vez más consciente de las propiedades beneficiosas de las hierbas. Al principio fue más bien un descubrimiento intuitivo, que se fue corroborando con el desarrollo de la ciencia. Las empresas farmacéuticas y marcas de cosméticos modernas, a pesar de todos sus logros, todavía utilizan recetas antiguas con la adición de plantas en sus productos.
baños de hierbas
Una de las formas populares de utilizar hierbas para mejorar el bienestar y la apariencia son los baños aromáticos. Este es un procedimiento sencillo que se puede realizar fácilmente en casa. Para hacer esto, tome una pequeña bolsa llena de hierbas, átela al grifo del baño y agregue unas gotas de aceite esencial al agua. Este método no sólo ayuda a mejorar el estado de la piel, sino que también llena el cuerpo de un agradable aroma.
Puedes agregar ingredientes adicionales al agua, como leche o sal marina, que potenciarán el efecto del baño. Después del procedimiento, se recomienda descansar un poco, envuelto en una toalla tibia, para disfrutar al máximo de los resultados.
Recetas del pueblo
Si no es posible organizar un baño de hierbas completo, puede utilizar otros métodos, por ejemplo, baños de heno para manos o pies. Esto es ideal para quienes sufren de artritis o dolor en las articulaciones. El polvo de heno mezclado con flores secas ayudará a aliviar la tensión y mejorará la circulación sanguínea.
Para potenciar el efecto, estos baños se pueden complementar con infusiones de hierbas, como salvia, romero o albahaca, que no sólo te ayudarán a relajarte, sino también a rejuvenecer la piel.
Té de recuperación
En momentos de estrés y cansancio, los tés calmantes son de gran ayuda. Por ejemplo, el té de melisa es un remedio natural para la recuperación y la relajación. Sólo 1 o 2 cucharadas de hierbas trituradas infundidas en agua hirviendo pueden restaurar el vigor y la armonía.
Para un sueño reparador y tranquilidad antes de eventos importantes, los tés elaborados con flor de tilo y salvia son muy adecuados. Te ayudan a relajarte, reducir la ansiedad y favorecer un descanso de calidad.
cuidado del cabello
Las hierbas también se utilizan para el cuidado del cabello. Por ejemplo, una decocción de bardana y ortiga se ha consolidado desde hace mucho tiempo como un excelente remedio para fortalecer el cabello y devolverle su brillo. Es importante que estos productos sean adecuados para todo tipo de cabello y no provoquen efectos secundarios.
Si tu cabello se vuelve graso rápidamente, puedes preparar una mascarilla especial de menta y serbal, que mejorará la condición del cuero cabelludo y dejará tu cabello más fresco.
Mascarillas
Las recetas antiguas también ofrecen muchas opciones para el cuidado de la piel del rostro. Por ejemplo, para pieles secas puedes utilizar mascarillas a base de menta, manzanilla o flor de tilo. Estos productos ayudan a hidratar la piel y devolverle su frescura.
Para pieles grasas son adecuadas las mascarillas que contienen salvia y caléndula, que regulan la producción de sebo y limpian los poros. Es importante recordar que para obtener el máximo efecto, las hierbas deben triturarse bien antes de usarlas para que las sustancias activas penetren más rápidamente en la piel.
Por tanto, las hierbas pueden convertirse en una ayuda indispensable para mantener la salud y la belleza, y las recetas antiguas siguen siendo relevantes en el mundo moderno.
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