Una receta para aprovechar los restos de requesón
Los buñuelos de requesón son un plato delicioso y sencillo, perfecto para utilizar el requesón que sobra en la nevera. Esta receta también es estupenda para quienes no son especialmente aficionados a este saludable producto en su forma pura. Los donuts salen increíblemente sabrosos, hinchados y rubicundos, y no es nada difícil prepararlos.
Para la preparación necesitará
200-250 g de requesón;
1 huevo;
1 taza de harina;
3-4 cucharadas de azúcar (puede aumentar la cantidad si prefiere rosquillas dulces);
azúcar de vainilla (opcional);
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico;
zumo de limón o vinagre
pizca de sal;
aceite vegetal para freír.
Empezar batiendo el huevo con el azúcar, el azúcar vainillado (si se utiliza) y una pizca de sal. Añada el bicarbonato, templado con vinagre o zumo de limón. A continuación, incorporar la harina tamizada y el requesón (si el requesón es grueso, es mejor pasarlo por un tamiz antes de utilizarlo). Amasar la masa.
Calentar el aceite vegetal en una cacerola pequeña y alta. Formar bolitas con la masa utilizando una cuchara mojada en aceite y echarlas en el aceite caliente.
Freír los donuts hasta que suban a la superficie y se doren uniformemente por ambos lados. Coloque los donuts terminados sobre una toalla de papel para eliminar el exceso de aceite.
Esta sencilla receta crea unos deliciosos donuts de requesón esponjosos y dorados que serán un gran manjar para la familia y los amigos. Gracias al uso de requesón, rico en proteínas y microelementos saludables, este plato no sólo es sabroso, sino también bueno para el organismo. Pruebe a preparar estos mágicos donuts y disfrute de su sabor único.