Fototerapia para fortalecer el cabello

Cada año aumenta significativamente el número de personas que sufren enfermedades capilares. Este problema afecta tanto a los residentes de ajetreadas metrópolis como a los que viven en tranquilos rincones de provincias o cerca de la naturaleza. Las causas pueden ser diversas, desde una ecología deficiente y situaciones de estrés hasta factores internos. Sin embargo, la fototerapia, también conocida como fotocromoterapia, es uno de los medios eficaces para combatir este problema.

Los aparatos que funcionan a base de luz de una determinada longitud de onda se utilizan a menudo para estimular la circulación sanguínea. La cosmetología utiliza desde hace tiempo diferentes colores de luz para tratar el cabello y el cuero cabelludo. Cada color tiene su propio efecto curativo, según el tiempo y la intensidad de la exposición. Por ejemplo, la luz roja estimula los mecanismos inmunitarios, reduce la inflamación y favorece la curación de las lesiones cutáneas.

Para las mujeres con alopecia androgénica, es importante reducir el nivel de hormonas sexuales masculinas con un tratamiento conservador antes de activar la circulación. Para los hombres, en cambio, el tratamiento con aparatos se recomienda sólo después del trasplante de pelo de la parte posterior de la cabeza, ya que este pelo no es sensible a los niveles de testosterona.

La fotocromoterapia es eficaz para diversos problemas capilares, como la caída del cabello, las puntas abiertas, el aumento de la sequedad y los picores. Sin embargo, antes de utilizar los dispositivos deben tenerse en cuenta contraindicaciones como las afecciones pustulosas del cuero cabelludo o los tumores.

Los estudios clínicos confirman la eficacia de la fotocromoterapia para combatir los problemas capilares, lo que hace que este método de tratamiento resulte atractivo para muchos.