Por qué las mujeres son más propensas a tener pesadillas: un estudio sobre los sueños

Las investigaciones demuestran que los sueños no son sólo experiencias de nuestra mente, sino también un reflejo de nuestro estado emocional. Un aspecto interesante de los sueños es que las mujeres son mucho más propensas a experimentar pesadillas que los hombres. Psicólogos de la Universidad de West Anglia, tras realizar un estudio de varios años utilizando un electroencefalógrafo (EEG), llegaron a una sorprendente conclusión: las mujeres experimentan terrores nocturnos casi el doble de veces que los hombres.

Durante cinco años de observación, los científicos registraron la actividad cerebral y grabaron las impresiones de los sueños de más de 1.000 personas. Resultó que el 34% de las mujeres que participaron en el experimento se quejaron de pesadillas, mientras que entre los hombres sólo el 19% notó terrores nocturnos. Y las mujeres describieron sus sueños como significativamente más imaginativos, aterradores y memorables.

Según los psicólogos, la razón principal de esta diferencia radica en la mayor emotividad de las mujeres. Por regla general, las mujeres viven más los acontecimientos del día y no pueden «desconectar» estas emociones, ni siquiera entrando en estado de reposo. Tienden a retener sus experiencias, lo que se manifiesta en sueños más vívidos y perturbadores.

Sin embargo, como señala el médico-somnólogo Grigory Argunovich, las pesadillas en sí no siempre son un signo de problemas o enfermedades mentales. Es importante comprender que este tipo de sueños pueden aparecer en cualquier persona como respuesta al estrés acumulado o a necesidades emocionales insatisfechas. Por ejemplo, las pesadillas de persecución pueden aparecer en quienes no resuelven asuntos importantes de su vida o no consiguen deshacerse de la ansiedad.

Sin embargo, conviene prestar atención a los sueños que se vuelven recurrentes o inusualmente vívidos. Si ciertas imágenes empiezan a aparecer con frecuencia, esto puede ser una señal para la persona de que su mente subconsciente está tratando de dirigir la atención hacia un detalle o acontecimiento importante que podría no haber notado en la vida real.

En el caso de que los sueños se vuelvan cada vez más perturbadores y recurrentes sin motivo aparente, esto puede indicar problemas psicológicos subyacentes. Es una señal de que merece la pena prestar atención a su estado emocional y tratar de encontrar formas de reducir el estrés o resolver problemas no resueltos.

Así pues, aunque las pesadillas por sí solas no siempre significan problemas de salud, pueden ser un indicador importante de ansiedad general y sobrecarga emocional. Es importante aprender a controlarlas y tomar medidas para mejorar el bienestar psicológico con el fin de recuperar la paz interior.