Agua y ardor de estómago: cómo hacer frente a esta desagradable afección

Una de las dolencias comunes que afectan hasta al 10% de la población adulta es la acidez de estómago. Esta afección suele ser un síntoma de la enfermedad por reflujo esofágico, que puede acarrear graves consecuencias, como la ulceración esofágica. Los médicos advierten de la necesidad de combatir esta afección. La causa principal de la acidez es el mal funcionamiento del anillo muscular de la parte inferior del esófago, que provoca el flujo regular del contenido del estómago hacia el esófago y causa ardor y malestar.

La acidez suele estar causada por una dieta y un estilo de vida inadecuados: comer en exceso, ingerir alimentos grasos, picantes y dulces, café, alcohol y acostarse después de comer. También puede ser consecuencia de otras enfermedades gastrointestinales. Si los ataques de acidez se repiten con regularidad, puede ser un signo de enfermedad por reflujo crónica.

Para tratar la acidez estomacal, es importante seguir las recomendaciones de los médicos y evitar los factores que la provocan. El primer paso es seguir una dieta adecuada: raciones moderadas, evitar el picante, las grasas, los alimentos ácidos y el café. También es importante no acostarse inmediatamente después de comer y mantener la cabeza y la parte superior del torso inclinados.

Para aliviar los síntomas de la acidez se utilizan varios métodos, como la dieta, el ejercicio y la medicación. El agua es especialmente útil para ayudar a expulsar el ácido del esófago y diluirlo en el estómago. También es importante evitar el estrés, controlar el peso y hacer ejercicio.

El tratamiento de la acidez estomacal puede incluir la toma de antiácidos, que neutralizan el ácido, y medicamentos que mejoran el estado de la mucosa esofágica. Sin embargo, antes de iniciar el tratamiento, es importante consultar a un médico y obtener asesoramiento y orientación profesional.