Luz solar y depresión posparto: relación con la época del año

Según los resultados de un estudio realizado en Suecia, ha quedado claro que las mujeres que han sido madres en otoño e invierno tienen más riesgo de desarrollar depresión posparto. Los expertos concluyeron que la principal causa de este hastío y apatía es la falta de luz solar. Los rayos ultravioleta, que afectan a los procesos químicos del cerebro de las mujeres tras el parto, tienen un impacto directo en el desarrollo de la depresión.

El estudio analizó los datos de dos mil mujeres que dieron a luz a lo largo del año. Se pidió a las participantes en el estudio que respondieran periódicamente a preguntas sobre su estado psicológico y físico tras el parto: cinco días, mes y medio y seis meses después del nacimiento del niño.

Los resultados del estudio mostraron que las mujeres que fueron madres entre octubre y diciembre tenían el doble de probabilidades de experimentar miedo, ansiedad, irritación y mal humor en comparación con las que dieron a luz entre abril y junio.

Según los médicos, esto se debe a la falta de vitamina D, que el cuerpo humano obtiene principalmente de la luz solar. Esta vitamina es conocida por su capacidad para prevenir la depresión y la fatiga.

La carencia de vitamina D puede afectar negativamente a la salud de la madre y el niño, no sólo después del parto sino también durante el embarazo. Durante este periodo, la carencia de vitamina D puede ser perjudicial para el desarrollo del cerebro y el sistema inmunitario del bebé.

Por ello, las mujeres que planean un embarazo o están embarazadas deben prestar atención a los niveles de esta vitamina en su organismo y, si es necesario, tomar suplementos recomendados por su médico. También es importante pasar más tiempo al aire libre y recibir luz solar para mantener sanos tanto a las futuras madres como a los bebés.