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Recientemente, investigadores alemanes de la Universidad de Ulm han presentado un nuevo método de lucha contra las arrugas, que puede convertirse en un serio competidor del botox no sólo en Europa. Este método combina la fototerapia y el uso de una loción con extracto de té verde.
Desde hace más de 40 años, la luz se utiliza con éxito para reducir las arrugas: la luz penetra en el tejido y cambia la estructura molecular, similar al pegamento que se encuentra entre las fibras de elastina. Las fibras de elastina son las proteínas responsables de la elasticidad de la piel y del tono de la pared vascular. La fototerapia ayuda esencialmente a "vaporizar" la capa de agua, lo que favorece la regeneración celular.
La novedad del método reside en la adición de una loción a base de té verde a la fototerapia. Según descubrimientos recientes, los antioxidantes presentes en el té verde multiplican varias veces la eficacia de la fototerapia.
Esta investigación abre nuevas perspectivas en el campo de la cosmetología antienvejecimiento, ofreciendo métodos más naturales y seguros para combatir las arrugas. El uso de fototerapia junto con extracto de té verde puede constituir una alternativa eficaz a los procedimientos inyectables.
Sin embargo, a pesar de los prometedores resultados, se necesitan más investigaciones para confirmar la eficacia y seguridad a largo plazo de este método. Por ahora, éste es sólo un posible método de lucha contra las arrugas que requiere más estudios.
Si se confirman los resultados del estudio, podría cambiar la forma de enfocar los procedimientos de rejuvenecimiento cutáneo, haciéndolos más accesibles y seguros para una amplia gama de pacientes.
En última instancia, el uso de la fototerapia combinada con extracto de té verde podría no sólo ser un método eficaz para combatir las arrugas, sino también una alternativa más natural y segura a los tratamientos tradicionales.
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