Matrimonio diferente: cómo hacer frente a las diferencias de renta y edad

Desigualdad de ingresos
El matrimonio entre cónyuges con ingresos muy diferentes puede plantear ciertos retos. Si uno de los cónyuges gana mucho más, esto puede afectar a la vida diaria y a las relaciones. Uno de los cónyuges puede permitirse compras y ocio caros, mientras que el otro se ve obligado a ahorrar dinero. Esto puede crear sentimientos de incomodidad y desigualdad.

Es importante hablar de antemano de los posibles problemas. Prepárate para que la gente de tu entorno hable de tu matrimonio y exprese su desaprobación. Ignorar esas conversaciones y tener confianza en tu elección te ayudará a hacer frente a las presiones externas. Recuerde que el componente financiero no debe ser el eje principal de su relación.

Diferencia de edad
Los matrimonios con una gran diferencia de edad suelen suscitar discusiones y juicios. Sin embargo, el amor entre personas maduras y adecuadas es la norma. Sin embargo, la diferencia de edad puede acarrear problemas en el sexo y la comprensión.

La energía sexual puede disminuir con la edad, lo que puede ser un problema para una pareja más joven. Además, los cambios estéticos, como las canas y las arrugas, pueden afectar a la percepción que la pareja tiene de usted. Es importante recordar que los apetitos sexuales pueden variar entre compañeros, y que los cuerpos perfectos son raros.

Problemas de comprensión
Las diferencias de edad también pueden dar lugar a diferencias de intereses y objetivos. Un cónyuge más joven puede buscar la promoción profesional y los viajes, mientras que una pareja mayor puede preferir una vida más tranquila. Sin embargo, los niveles de energía no siempre dependen de la edad, y es importante discutir sus expectativas y objetivos antes del matrimonio.

Franqueza y honestidad
Una regla básica es ser franco sobre las posibles dificultades antes de casarse. Si sus objetivos y su visión de la vida son demasiado diferentes, quizá merezca la pena esperar para casarse. El amor puede superar muchas cosas, pero no todo. El matrimonio debe basarse en objetivos comunes y comprensión mutua.

Prepárate para las presiones externas
Prepárate para las reacciones de la sociedad y las familias. Puede que no acepten tu matrimonio de inmediato. Con el tiempo, al ver vuestra felicidad, las personas cercanas pueden cambiar de opinión. Es importante que sigas confiando en tu elección y no cedas a las presiones externas.