Los enamorados se parecen: mito o realidad

El fenómeno de que las parejas de enamorados empiezan a converger en apariencia con el tiempo ha llamado la atención durante mucho tiempo.

Una reciente investigación de psicólogos de la Universidad de St Andrews ofrece una nueva perspectiva del fenómeno. Se ha descubierto que nuestra percepción confunde a menudo causa y efecto: las personas no se parecen en el transcurso de una relación, sino que inicialmente eligen parejas similares.

Psicólogos y fisiólogos aún no han desvelado el misterio de este fenómeno. Quizá la similitud externa crea un sentimiento de confianza, o simplemente preferimos ver en nuestras mitades un reflejo de nosotros mismos.

Esta regla es válida incluso para personas con una apariencia sobresaliente, que atraen la atención con su singularidad. Por insólito que parezca, pero las investigaciones sugieren que los amantes con rasgos externos tan atípicos pueden acercarse en apariencia, al menos superficialmente.

Así pues, el fenómeno de la similitud exterior en las parejas puede ser el resultado de nuestras elecciones de pareja más que de los cambios que se producen en el transcurso de la relación. Nosotros mismos damos forma al contorno de nuestras futuras relaciones prefiriendo a quienes ya son similares a nosotros.