Qué hacer si su pareja evita la intimidad

Muchos hombres se enfrentan a una situación cuando su pareja pierde el interés por el sexo, y esto les causa perplejidad. A menudo, las mujeres tampoco pueden entender por qué pierden el deseo de mantener relaciones sexuales con su amado. En tales casos, una mujer puede acceder a la intimidad sólo para evitar ofender a su pareja, pero si no es satisfactoria, puede empezar a percibir el sexo como violencia. Si una mujer experimenta malestar, ya sea psicológico, mental o físico, puede empezar a evitar la intimidad.

Uno de los principales problemas en estas situaciones es que los hombres no siempre entienden las razones de las negativas. A menudo, una mujer que rechaza el sexo no revela sus verdaderos sentimientos, ocultándolos tras frases como «estoy cansada» o «me duele la cabeza». Los hombres pueden no darse cuenta de que detrás de estas palabras se esconden problemas más profundos, y esto agrava la situación.

A menudo el problema es la falta de franqueza entre la pareja. Una mujer puede no hablar directamente de sus sentimientos y miedos, lo que da lugar a malentendidos. Por ejemplo, una mujer que se siente como una «muñeca de goma» que sólo sirve a los deseos masculinos puede evitar el sexo sin darse cuenta del todo. Resolver estos problemas requiere respeto mutuo y una comunicación sincera.

Las razones fisiológicas también pueden influir en la disminución del deseo sexual. El cansancio del trabajo y las tareas domésticas pueden hacer que una mujer simplemente no tenga energía para el sexo. En tal caso, es importante que la pareja ofrezca apoyo y comprensión, además de encontrar formas de aligerar la carga de su pareja. Las enfermedades y dolencias físicas también pueden reducir el deseo, y en esos casos es importante buscar ayuda médica a tiempo.

La pereza y la falta de iniciativa también pueden afectar a la calidad de la vida sexual. Si la pareja no se esfuerza por mejorar su vida íntima y satisfacerse mutuamente, puede disminuir el interés. Después del parto, por ejemplo, una mujer puede estar centrada en el bebé y olvidarse de sus necesidades sexuales. En estos casos, es importante que el hombre sea persistente y cariñoso.

Las razones del enfriamiento de la relación pueden ser diversas: desde sensaciones desagradables durante el sexo y olor desagradable hasta timidez y monotonía en la vida íntima. A menudo, los miembros de la pareja no hablan de estos problemas para no ofenderse mutuamente. Sin embargo, una comunicación abierta y honesta puede ayudar a comprender y resolver los problemas, lo que a la larga conducirá a una mejor vida sexual y a una relación más sólida.