Tratamiento capilar: consejos y recomendaciones

Es fácil dañar el cabello. Los productos químicos para alisar, las planchas, los tintes, los secadores y las permanentes pueden hacer que tu pelo se vuelva quebradizo y sin brillo. Cuando veas en el espejo que tu pelo necesita una cura, es importante que acudas a un profesional.

Si el daño es demasiado grave, la mejor solución es un corte de pelo. Un estilista cualificado no sólo te ayudará a deshacerte de las puntas dañadas, sino también a encontrar el corte de pelo perfecto. Puede resultar caro, pero el resultado merece la pena.

Si decides no cortarte el pelo, tendrás que cambiar tu hábito de utilizar herramientas térmicas. Los arados y las planchas deben sustituirse por métodos de peinado más suaves. Utiliza el secador sólo como último recurso para minimizar el impacto sobre el cabello.

La frecuencia de lavado del cabello debe reducirse al mínimo. Utilice un champú suave para cabellos dañados y asegúrese de cuidarlos con productos especializados, como acondicionadores profundos y mascarillas nutritivas de farmacia. También es importante consumir multivitaminas para acelerar el crecimiento del cabello.

Para el cuidado en casa, puedes utilizar mascarillas a base de aceites naturales como el aceite de oliva o el aceite de coco. Extiende el aceite por todo el cabello, masajeando el cuero cabelludo y déjalo actuar toda la noche o durante unas horas. Esto ayudará a restaurar la estructura del cabello y le devolverá un aspecto sano.

Para quienes deseen una solución natural, la henna es un remedio estupendo para fortalecer y dar brillo al cabello. Aunque la henna también se utiliza para teñir, también ayuda en el tratamiento: basta con aplicarla sobre el pelo durante un rato y aclararla. Sin embargo, no hay que abusar de la henna para no resecar el pelo.

Así pues, para que el tratamiento capilar tenga éxito, es importante combinar los servicios profesionales con los cuidados en casa, prestando atención no sólo al aspecto, sino también a la salud del cabello. La restauración eficaz es posible con un cuidado sistemático y una atención cuidadosa a la elección de los productos de cuidado.