Un poco de estrés: beneficios para el cerebro

Investigadores estadounidenses han descubierto que el estrés de corta duración tiene un efecto favorable sobre la actividad cerebral, mejorando las funciones cognitivas y aumentando la concentración. Los resultados del experimento demostraron que tras un estrés breve pero intenso, el número de células madre del cuerpo humano casi se duplica, convirtiéndose entonces en nuevas neuronas.

"A menudo vemos el estrés como algo negativo, pero en realidad no lo es. Las situaciones estresantes de corta duración pueden ser beneficiosas porque nos mantienen alerta y nos obligan a permanecer atentos", afirma Daniela Kaufer, autora del estudio.

El estrés de corta duración mejora la actividad cerebral y afecta favorablemente al estado mental. Sin embargo, los expertos recuerdan que estar constantemente en estado de estrés, por el contrario, puede inhibir la formación de nuevas neuronas, lo que en última instancia empeora la memoria.

Según el estudio, el mecanismo que subyace a este fenómeno es que el estrés estimula los procesos asociados a la formación de nuevas neuronas en el hipocampo, la parte del cerebro responsable de la memoria y las funciones cognitivas.

Además, los científicos señalan que el estrés a corto plazo puede ayudar a aumentar el nivel de adaptación del organismo a diversas condiciones y factores estresantes, lo que a su vez puede mejorar la resistencia general de una persona a los retos cotidianos.

Es importante señalar que, para conseguir efectos positivos, el estrés debe ser breve y no constante. Estar constantemente en situaciones estresantes puede tener consecuencias negativas para la salud física y mental de una persona.